domingo, 15 de febrero de 2015

La puerta de una diosa



Muchas  o poco sabemos sobre las 7 maravillas del mundo moderno, esta vez les hablare de una de las 7 maravillas del mundo antiguo, conocida como la puerta de Ishtar.
La puerta de Ishtar era una de las ocho puertas de la muralla interior de Babilonia, la más hermosa y famosa era la octava de las puertas de acceso. Las ocho puertas fueron  dedicadas a las divinidades adoradas por los babilonios.

Esta puerta  era de grandes dimensiones y suprema belleza ya que estaba hecha con ladrillo vidriado hecho con gran delicadeza era lo más nuevo en construcción en la época, coloreado con polvo de lapislázuli tenia grabado en sus extremos leones, dragones, toros que simulaban andar y seres mitológicos su techo y puertas eran de cedro. Se le dio el nombre de Isthar  en honor a la Diosa lunar, señora del firmamento poderosa diosa del amor y de la guerra. Las puertas eran abiertas para darle paso a las procesiones ya que era la entrada principal a las calles y templos que se encontraban en el interior de Babilonia. Al cruzar dicha puerta, se llegaba al Templo de Bel, donde se celebraban las fiestas del año nuevo.


Esta puerta fue construida por el rey Nabucodonosor II en el año 575 La Puerta de Ishtar contaba originalmente con dos esfinges dentro del arco de la puerta, que no han sido localizadas hasta la fecha. El descubrimiento de la puerta de Ishtar se dio entre 1899 y 1914, actualmente la puerta fue reconstruida y su exposición se encuentra en Museo Pérgamo de Berlín.
 





  Ahora que ya conocemos un poco de la historia de la puerta de Ishtar,  cómo está hecha y quien fue el que la construyo debemos saber más sobre la diosa en la cual se inspiró

 La historia de la diosa Ishtar inspiro la puerta de color azul  e incrustaciones doradas y rojos,  pero así como es interesante la puerta también lo es la historia de la diosa Ishtar. diosa del amor y de la guerra. Se le atribuye que era protectora de las relaciones extra maritales y la prostitución, cuando nos referimos a extra maritales se entiende como infidelidad, esto nos hace suponer que en Mesopotamia la infidelidad estaba permitida. 

 
Se pensaba que la diosa era quien cuidaba a las prostitutas y daba paso para que los hombres pudieran estar con ellas y al momento de la relación sentir que la diosa estaba con ellos todo esto se hacía en honor a Ishtar dentro de un templo consignado a ella donde sus sacerdotisas le veneraban culto teniendo actos sexuales, llamada sexo ritual, incluso se consideraba que las jóvenes vírgenes tenían que dar su primera relación sexual a la diosa. Consideraba que no era castigo tener muchas amantes y que el matrimonio era solo un contrato para tener riquezas o formar una familia con hijos para que heredaran  dichos bienes, nunca se habló de amor alguno al momento del matrimonio. 
La diosa Ishtar no era diosa madre ni diosa de familia, su dedicación era lo que los babilonios creían correcto, por esa razón la adoraban y era de suma importancia para ellos.


La Veneración a la Diosa también la vemos en nuestra época, específicamente el culto que se le da a la Virgen María, aunque no es considera Diosa se le rinde culto por ser la madre de Dios en el cristianismo, y su imagen es importante porque se reconoce a la mujer como dadora de vida. Aun en los seres supremos.




Aunque parecen diferentes  la Diosa Isthar con la Virgen María es muy curioso que la vestimenta de la madre de Dios tenga los colores de la puerta principal a la entrada de babilonia que representaba a la Diosa del amor y de la guerra.
En la biblia se conoce la historia de María Magdalena considerada adultera, lo que muchos no saben es que María Magdalena es considera la guardiana de la tradición del culto a la Diosa Madre  sacerdotisa de Ishtar.  En este caso nos hacemos una pregunta ¿será posible que ishtar y la virgen María sean la misma?.. 


  Puede ser así y la Diosa Isthar tras el paso del tiempo pudo ser adoptada por las iglesias cristianas y convertida en una imagen de madre, para seguir siendo adorada. Aunque con otro sentido ya no como protectora de las prostitutas, ni del adulterio, si no como una mujer sumisa, amorosa, madre y esposa.





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